CROACIA, DE UN PAIS EN GUERRA A UN PAIS TURISTICO//CROATIA, FROM A PARENT AT WAR TO A TURISTIC PARENT
Dejamos atrás Pec, para introducirnos por una peligrosa carretera de montaña, con túneles horadados en la piedra, sin más tipo de protección que la propia roca. Se me antojaba que el autobús iba a quedar atrapado de un momento a otro. No era habitual, pero el autobús era bastante cómodo, aunque al comienzo del largo viaje, la sinuosa carretera, obligaba al conductor a tomar mil y una precaución, pero me sentí seguro en él. El tiempo pasaba lento, cada hora hacían un breve alto, en áreas de descanso. Tras recorrer 275 kilómetros, alcanzamos la ciudad de Budva en Montenegro. Aquí la parada fue un poco más larga, pues hubo relevo del conductor oficial y el auxiliar, se despidieron del pasaje y se hicieron cargo otros dos conductores. Entre sí, éstos como los anteriores, se alternaban al volante en las paradas intermedias. En la que hicimos en Kotor, me compré algo con que entretener el estómago, para lo que quedaba de viaje. Había perdido la noción del tiempo, cuando anu